Hacía tanto que no escribía algo acá. Tanto. Que ahora al hacerlo (al intentar hacerlo) siento una ostranenie que ni les cuento (?). Tantas ideas, tan heteróclitas e intrascendentes. Tantos sentimientos encontrados. Tantos recuerdos. Y todo mezclado. Todo. Y ganas de reir. De reir porque sí. Y que la gente me mire y no entienda nada. Y piense que estoy loca. O enamorada. Y que me encante hacer lo que hago. Todo el tiempo. Aunque sean cosas que parezcan rutinarias. En el fondo, lo rutinario es tan irreal, tan construcción. No hay dos acciones exactamente iguales (como no hay dos personas exactamente iguales). Descubrir la unicidad depende de cada uno. Así que sí, vivir cada cosa, cada momento, cada encuentro, cada lectura, cada trabajo, cada paso, como lo único que son.[1] Disfrutar. Sobre todo eso. Disfrutar.
[1] frase gramaticalmente dudosa, es cierto, pero después de ciertas lecturas palaciegas no hay límites de ningún tipo que limiten mi expresión (?)
8 comentarios:
Remolino de emociones. Conozco tantos distintos, todos con intensidades diferentes, más o menos fugaces (o permanentes).
Hay veces que no sé si no será esta especie de escepticismo la que me está matando de a poco.
Y a veces creo que no hay tal cosa como el escepticismo. Y me caigo todavía un poquito más.
Por momentos confundo mis emociones. ¿Existen tales "cosas"?
No sabría cómo se puede ser tan incoherente.
Y sin embargo, la entereza.
Fragmentariedad.
Y sin embargo, el mundo.
Que sigue y sigue. El Tiempo.
Pero yo digo Intrascendencia.
Y sin embargo, ¿es tal?
¡¡¡Comparto totalmente la ostranenie!!! Hace tanto que no entraba a los blogs que ahora me siento extranjero en mi propia patria.
Helios.
Mmmm.. Gaby... No quiero caer en juicios infundados, pero esta actitud me recuesad mucho a un tiempo muy lejano en mí (no en distancia cronológica per sé).
¿Loca o enamorada? ¿No son acaso la misma cosa? Sin lugar a dudas sí.
No sé si será, una o la otra, o ambas, pero me encanta. Te adoro, y lo que te haga feliz a vos, me hace feliz a mí. Diosfrutá de cada paso que des en las nubes. A pesar de todo, vale la pena...
Y si es sólo locura, disfrutala igual. Como diría nuestra amiga Alicia, que los demás no comprendan la Intención pragmática del discurso, es su problema, no el tuyo.
Lograste, aunque no lo creas, sacarme un poc la nube negra que rondas mi cabeza. Gracias...
Te amo
*recuerda
el escepticismo (o lo que entendemos como tal, después de todo moldeamos la realidad a través del lenguaje y todo eso) sí que existe (para mí).
y es peligroso, porque trae la desesperanza y otras cosas de la mano.
pero vos no sos escéptica creo yo.
creés en varias cosas imprtantes y sos coherente con eso. y con vos misma. eso es lo más importante creo.
y todos cinfundimos las emocioens, pero hay algo muy ene l fondo que nos mantiene firmes, y que no es fugaz y no pasa. y cuando no podemos verlo están los demás (esos demás de fierro, que están siempre) para hacérnoslo recordar.
eso.
Realmente mi mímesis es mi brújula.
¡¡¡LALIN TE EXTRAÑÁBAMOS!!!
¡QUEREMOS POLÉMICA EN EL BLOG!
¡y dulces caritas de malhumorado!
¡Volví lule querida! Me alegra saber (nuevamente) que mi némesis (¡con todo el cariño amiga!) sea la primera en demostrarme su extrañeza (extrañeza de extrañar, no de sentirse extrañado-de extrañamiento, ante cualquier duda ver esc. de Frankfurt).
Lamento mucho mi silencio. Hoy por fin he recuperado la máquina, esperemos dure un tiempito antes de partir hacia el cielo de las computadoras.
La verdad que todo me es extraño ahora (en este caso sí refiero a la extrañeza de extrañamiento), creo que he perdido muchas cosas, pero lo peor es que no puedo reconocerlas aun, por ende mi búsqueda es nada.
Los dejo amigos, espero veros.
Helios.
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